¿Qué significa la pulsera roja en el tobillo izquierdo?

¿Ya viste que muchas personas utilizan cintas rojas en el tobillo izquierdo o en la mano izquierda? Te revelamos el significado de este popular amuleto.

En la antigüedad, los antiguos cabalistas revelaron un poderoso método de protección. Su finalidad es doble: protegernos de las miradas envidiosas de los demás y ayudarnos a eliminar los sentimientos de celos y resentimiento en nuestro interior.

Los preceptos cabalísticos no contienen prohibiciones ni mandatos. Más bien, los cabalistas hablan de energías positivas y negativas. Las energías negativas de los celos y la envidia emanan de los ojos, lo que da origen al antiguo y significativo término “mal de ojo”.

Fuente: CANVA

El mal de ojo forma parte de la historia de la sabiduría humana. Sócrates, Platón y Aristóteles hablaron de él. Se menciona en la Biblia. A lo largo de los siglos, reyes, reinas y conquistadores lo han temido y respetado. Los antiguos marineros griegos pintaban ojos en la proa de sus barcos para protegerse de su poder. Los romanos lo llamaban oculus malus. Para los escoceses era droch shuil. Los cabalistas lo llaman ayin harah. ¡Esto es muy interesante!

Según los cabalistas, esta forma de energía negativa puede afectar a nuestras vidas y a nuestro bienestar. Puede impedir que cumplamos nuestro destino y también hacer que perdamos lo que ya hemos conseguido.

El simbolismo del hilo rojo.

El hilo rojo: Símbolo de amor y sensualidad, aporta un toque de calidez a tus atuendos. Este color puede llevarse tanto en una mujer como en un hombre. También es un color energético. El color rojo aporta fuerza, seguridad y coraje en los momentos difíciles.

Llevando este amuleto de la suerte, a la persona que tenga este hilo rojo le ocurrirán sobre todo cosas positivas. En teoría, la persona podrá atraer lo que desea, como prosperidad, amor, armonía, esperanza y muchas otras cosas.

Fuente: CANVA

El uso del hilo rojo.

El hilo rojo sólo debe llevarse en la muñeca izquierda o el tobillo izquierdo. También es muy importante que sea alguien muy cercano a ti quien lo ate, ya que solo pensará cosas buenas de ti mientras lo hace. ¡Tiene que ser alguien que te quiera!

Después de ponérselo en la muñeca, la persona que lleva el hilo rojo debe mantenerlo puesto hasta que se desgaste por sí mismo y se rompa. Esto significará que ha absorbido todo lo negativo que rodea a la persona.

En este momento, hay que tener cuidado. La persona no debe pensar en volver a ponerse ese mismo hilo rojo y se aconseja dejarlo en un lugar que ya no te permita volver a verlo.

Después, puedes colocarte un nuevo hilo rojo, atarlo y todo el ciclo vuelve a empezar. Algunas personas creen que este proceso procede de una tradición judía centenaria para alejar los pensamientos negativos.

¿Ya tuviste tu hilo rojo?

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